La red global de emprendedores se expande en Centroamérica, abriendo nuevos Impact Hubs en El Salvador, Costa Rica, Nicaragua y Honduras en el 2017.


Impact Hub es una red creciente de organizaciones empresariales que nació en Londres en el 2005. Es una comunidad global de emprendedores. Con base en los valores de valentía, confianza y cooperación, promueve y apoya el desarrollo del emprendimiento, las MIPYMES y la innovación del impacto socio-ambiental en el mundo.

Actualmente cuenta con más de 90 Impact Hubs en los cinco continentes. Suma más de 16.000 miembros, de los cuales 15.000 son miembros de las comunidades y 1.200 son fundadores o makers de los Impact Hubs. Ha llegado a más de 25 millones de clientes y beneficiarios.

Según lo publicado en su informe de impacto del 2016, entre las áreas de impacto en las que más se enfocan sus miembros están: educación, medioambiente, empleo, sostenibilidad, salud y bienestar, economía, ONGs y emprendedores sociales, niñez y familia, cambio climático, y desarrollo internacional.

Vladimir Olarte, Líder de América Latina y de Crecimiento Global, y Claudia Valladares, co-fundadora y directora del Impact Hub Caracas, le comentaron a AméricaEconomía Centroamérica sobre Impact Hub, cómo formar parte de la red, los programas que desarrollan, y sus planes en Centroamérica.

UNA COMUNIDAD DE EMPRENDIMIENTO

Cada Impact Hub es un espacio físico de trabajo y de colaboración. Es un conjunto de una comunidad emprendedora, a la cual se busca inspirar, conectarlos y brindarles herramientas para que sus ideas y proyectos sean sostenibles.

“Estamos localmente enraizados pero conectados globalmente”, refleja Valladares. “Cada Impact Hub tiene su sabor local y aborda los retos de su ciudad. A través del emprendimiento en sus múltiples facetas busca responder a esos retos y necesidades con iniciativas y proyectos que verdaderamente generen impacto en la sociedad y en todos sus ámbitos.”

En ellos se realizan eventos y programas diseñados para estimular y apoyar el desarrollo del emprendimiento y de empresas en diversas etapas, desde los que están en la fase temprana de ideas, a los que ya cuenta con sus planes de negocios ya formulados, los que están en etapa de start-up, en la fase de crecimiento, o a los que están en una etapa madura, explica Olarte.

Los miembros valoran las sinergias que se crean como producto del networking dentro de cada Impact Hub. Un miembro contrata a otro como proveedor de servicios, o uno de los miembros se torna cliente, o socio, agrega Olarte. En el 2016, un tercio de los miembros del Impact Hub de Caracas “hicieron algún tipo de alianza o comenzaron una nueva idea con otro, simplemente por estar presentes compartiendo con una comunidad”, comenta Valladares.

LA DIVERSIDAD ENRIQUECE

Un Impact Hub es más que un espacio para trabajar; “es un espacio para colaborar, hacer eventos, y demás. Por eso le llamamos un espacio colaborativo. No nos gusta cuando nos denominan como un coworking space”, dice Olarte.

El único requisito para ser miembro de un Impact Hub es tener un emprendimiento o idea que se quiere impulsar. Claudia Valladares hace hincapié en que son “muy cuidadosos de no llenarse del mismo tipo de emprendedores y emprendimientos para tratar de mantener siempre una diversidad en la comunidad. Creemos que la diversidad nos enriquece.”

En un mismo Impact Hub se pueden encontrar desde artistas, personas trabajando en agronomía, en ciencias, educación, a gente en áreas de desarrollo de apps o marketing digital. Lo importante es que cada uno de ellos vaya a agregar un valor a la comunidad, y que tenga las mismas intenciones y valores.

Los costos de las membresías varían en cada país, y se ajustan a las necesidades y posibilidades de los miembros. Comúnmente ofrecen los siguientes planes: el Impact Hub Connect, diseñado para personas que simplemente quieren estar conectadas a la comunidad pero no necesariamente necesiten trabajar físicamente en el Impact Hub. Asimismo existen paquetes que van desde 25 horas al mes, 50 horas, 100 horas, y tiempo ilimitado, que permiten un espacio para trabajar y compartir con los demás miembros. Luego hay quienes tienen una oficina privada pequeña. Las membresías de más horas incluyen otros servicios: casilleros, acceso a salas de reunión, entre otros.

Pero las comunidades no están compuestas solamente por emprendedores. Buscan atraer a ellas a lo que denominan como los “enablers”, o los facilitadores. “Son individuos u organizaciones que como parte de su actividad central está el promover y apoyar el desarrollo de emprendimientos”, explica Olarte.

Son inversionistas ángel, fondos de inversión de impacto social, venture capitalists, empresas que brindan capacitaciones en temas de emprendimiento y decisión de negocios, empresas que tienen programas de incubación o de aceleración de empresas.

IMPULSANDO AL EMPRENDEDOR

Para apoyar de forma más efectiva a emprendedores y MIPYMES en diferentes etapas de desarrollo, Impact Hub coopera en el desarrollo de programas y proyectos de ideación, incubación, aceleración, escalamiento y consultoría para MIPYMES con socios estratégicos.

Estos socios estratégicos incluyen instituciones de desarrollo multilateral como el Banco Inter-Americano de Desarrollo (BID), Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) y Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), fundaciones como World Wide Fund for Nature (WWF), y grandes empresas multinacionales y nacionales como la aseguradora AXA, y la consultoría estratégica Boston Consulting Group (BCG), entre otras.

Actualmente se están estructurando nuevos programas para apoyar emprendedores en diversas etapas de desarrollo. Existen programas de ideación que seleccionan a personas que tienen alguna idea o un plan en mente pero no han estructurado un modelo de negocios. Luego hay programas de incubación en el que se escogen empresas en fases tempranas de su desarrollo.

Para emprendedores que ya están operando existen programas que les ayudan a crecer: programas de aceleración y programas que los impulsan a escalar.

Impact Hub cuenta con varios programas de aceleración a nivel mundial. Uno de ellos es el programa “Kickstart Accelerator” para empresas en los sectores FinTech, alimentación, robótica y sistemas inteligentes, ciudades inteligentes y salud. Un segundo llamado “Prevención con Impacto”, desarrollado junto con la aseguradora AXA, está orientado a empresas en los rubros de seguridad y salud. Adicionalmente, tienen un programa de aceleración en Turismo Sostenible. Esos tres programas buscan atraer y apoyar empresas de América Latina y cualquier lugar del mundo.

El “Scaling Program” está dirigido a “empresas que ya cuentan con una operación estable y que quisieran replicar su modelo de negocios en otras geografías dentro de su mismo país o de otros países”, explica Olarte. Actualmente opera en ocho países de Europa. A partir del segundo semestre del 2017 se planea iniciar la implementación del programa para 60 empresas de México, Costa Rica, Colombia y Brasil que deseen replicar y escalar sus negocios a nivel nacional e internacional.

IMPACT HUB EN CENTROAMÉRICA

El primer Impact Hub en la región se abrió en Antigua Guatemala. A éste se suma el Impact Hub en Santo Domingo, República Dominicana. La red se extenderá en el 2017. En El Salvador, el coworking space llamado Point se convirtió en Impact Hub San Salvador el pasado mes de abril.

Un caso similar se da en Costa Rica donde otro coworking space existente, Impactico, se encuentra en proceso de convertirse en Impact Hub San José. Se espera que abran para el tercer trimestre del año. Los planes son abrir un Impact Hub en Nicaragua y Haití entre el tercer y cuarto trimestre del año. Mientras, en Honduras están en proceso de identificar un equipo.

“En este momento tenemos tres iniciativas en curso con el Fondo Multilateral de Inversiones (FOMIN) del Banco Interamericano de Desarrollo. La primera iniciativa apoya la creación de tres Impact Hubs en El Salvador, Nicaragua y Honduras entre abril y diciembre 2017. La segunda iniciativa es un Programa de Incubación de 160 emprendimientos sociales y empresas de la economía del conocimiento en El Salvador, Nicaragua y Honduras. Las convocatorias iniciarán en el segundo semestre de 2017 y se implementará en 2018 y 2019. Y la tercera es el Programa de Incubación ‘Impact Hub Fellowship en Venezuela’”, comenta Olarte.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *