Ejecutivos podrán enfocarse en el desarrollo del negocio con la confianza que sus decisiones y acciones no solo cumplirán con la ley sino que se anticiparán a las crisis.
Los cambios legislativos requieren de una adaptación continua de las normas a los criterios y nuevos lineamientos establecidos. Por lo anterior, es de imperiosa necesidad que las personas naturales y las empresas cuenten con la asesoría debida en materia jurídica para efectuar las actuaciones de conformidad con la legislación vigente. Ya que no se podrá alegar la ignorancia de los mismos como excusa a la falta de acatamiento.
Un ejemplo sobre los cambios en la legislación en la región se da con una de las disposiciones que se definen en el artículo 38 del Protocolo al Tratado General de Integración Económica Centroamericana, que establece políticas, directrices e instrumentos jurídicos para el proceso de Unión Aduanera que se está dando entre países de Centroamérica.
La figura del asesor jurídico tiene más peso. Existen varias opciones, que van desde contar con un asesor interno en la compañía o confiar en una firma externa para que sea la encargada de llevar todos los temas relacionados con ese ámbito.
El papel principal del abogado corporativo es el de hacer cumplir toda la legalidad en lo referente a las operaciones que se lleven a cabo desde la empresa, encargarse de proporcionar asesoramiento en todo lo referente a la constitución del país o los países sede de la organización, intervenir asesorando en cuanto a derecho empresarial o incluso en cuanto a materia de propiedad intelectual e industrial se refiere, preparar todo lo relacionado con declaraciones y obligaciones fiscales y tributarias, orientar las acciones a desarrollar en el marco legal, y evitar que la empresa se tenga que enfrentar a situaciones negativas, entre otros.
AméricaEconomía Centroamérica conversa con expertos académicos y ejecutivos de grandes bufetes legales de la región para abordar los retos en materia de asesoría legal corporativa que tienen las empresas.
PREOCUPACIONES JURÍDICAS EMPRESARIALES
Octavio Martínez, director académico del diplomado en Administración de Negocios en INCAE Business School, considera que las principales preocupaciones de las empresas en la actualidad son el cumplimiento regulatorio (compliance) y el costo de los procesos legales en general.
“Observamos un creciente enfoque de las empresas en el cumplimiento de normas internacionales en asuntos de lavado de activos, terrorismo, narcotraficantes y corrupción. Y por otro lado, notamos una creciente preocupación por la predictibilidad del costo final de los procesos legales. Las personas somos naturalmente adversas a la incertidumbre. La idea de empezar un caso legal y no tener una idea clara sobre cuánto será el costo total, parece aterrar a muchas personas y dificultar la planificación financiera en las organizaciones”, dice el académico.
Con el respaldo de una buena asesoría legal, los ejecutivos pueden enfocarse en el desarrollo del negocio con la confianza que sus decisiones y acciones no solo cumplirán con la ley, sino que también consideran integralmente los diferentes riesgos que éstas implican.
El especialista determina que la asesoría legal debe acompañar a los negocios desde la génesis de los mismos. “En esta etapa emprendedora, la asesoría debe analizar y recomendar la estructura o vehículo de constitución jurídico más adecuado para lograr la finalidad de la empresa. Luego debe acompañar el desarrollo del negocio, no solo para atender los retos jurídicos que se presentan, sino principalmente para evitar que surjan. Por lo tanto, la decisión gerencial de fondo no es cuándo buscar la asesoría legal, sino cuál puede ser el esquema de servicio que cubrirá mejor las necesidades de la organización considerando sus recursos financieros y la complejidad de su negocio”.
El abogado Humberto Pacheco, especialista en Planificación Tributaria Internacional, coincide con que el asesoramiento legal es necesario desde el comienzo de una empresa, “de modo que todo lo que tenga que ver con cumplimiento legal se vaya haciendo dentro de la firma. De esto se evitan muchos problemas, salvo aquellos que no son previsibles”.
Terencio J. García Montenegro, socio y director regional de García & Bodán, considera que el tema principal en la región ha sido la certidumbre jurídica y la institucionalidad. Es decir, la certeza de los empresarios de que cualquier diferendo o controversia que tengan con sus contrapartes o en sus inversiones sean solucionadas de una manera justa, apegada a derecho y de una forma rápida.
“Esto va mejorando a nivel de Centroamérica y el Caribe, pero todavía falta, como nos falta en toda América Latina, pero vamos por el camino correcto. El valor de la asesoría jurídica al final se debe traducir en dinero para los clientes, en decirles cuáles son los riesgos que está enfrentando, las ventajas que está teniendo desde el punto de vista legal, y así en base a eso pueda tomar su decisión. Ahí radica, en dar con claridad los riesgos que el cliente puede sufrir al tomar decisiones”, afirma.
TENDENCIAS
Octavio Martínez describe que una de las principales tendencias en el ámbito de las firmas legales es la incorporación de tecnología para gestionar los procesos legales de manera más estructurada y eficiente. La profesión está evolucionando de una práctica tradicional gestionada de manera “artesanal”, a una práctica moderna apoyada con mejores prácticas de gestión, procesos y tecnología.
“Otra tendencia muy marcada en la región es la práctica legal multi-jurisdiccional. Observamos firmas expandiéndose a los países de la región, posicionándose de manera única para atender a empresas con presencia regional o global. En este tipo de proveedor de servicio multi-jurisdiccional se están abriendo oportunidades de movilidad internacional del talento, lo cual era muy inusual en el modelo tradicional de la firma exclusivamente doméstica”, explica.
Respecto a los servicios multi-jurisdiccionales, el abogado Pacheco refiere que existen muchas firmas muy valiosas que están buscando alianzas. Muchas de ellas ya se han aliado con firmas internacionales, y otras han manejado su relación con las firmas internacionales sin someterse a una marca específica.
“En mi criterio no es necesario someterse al beneficio de una sola gran firma internacional. La forma en que se ha operado es que las mejores firmas internacionales lo busquen a uno para representarla y si uno se alía con una sola, las otras no lo van a buscar. Eso es un arma de doble filo. Sin embargo, la tendencia al crecimiento ha llevado a muchas firmas a eso y hay cierto factor imponderable en este momento en nuestro medio legal. Algunos creen que con el gigantismo se puede manejar mejor las cosas. En cambio, si se queda pequeño pueden ser desplazados por costos. Estos son dilemas a los que no le he visto una solución perfecta. Pero un balance entre las dos áreas y una alianza entre firmas de abogados locales puede ser lo aconsejable”, reflexiona Pacheco.
Finalmente, hay una tendencia muy marcada hacia el diseño de modelos de atención “cliente-céntricos”. “Esta tendencia refleja una mayor preocupación de las firmas por la experiencia y satisfacción del cliente en su interacción con su proveedor de servicio. Esta tendencia está llevando a las firmas a mejorar sus tiempos de respuesta, estilos de comunicación, transparencia en la facturación y seguridad informática para proteger la información de los clientes”, dice Martínez.
IMPORTANCIA DEL ASESORAMIENTO LEGAL
Los abogados de Central Law están convencidos de que el asesoramiento legal es clave para el desarrollo de negocios en la región. “Las empresas pueden contar con abogados in-house que resuelven el día a día de las operaciones de la empresa, pero necesitan contratar un equipo legal externo especialista en el sector o rubro de la empresa. Nuestros abogados son el aliado estratégico de nuestros clientes. Junto a sus departamentos jurídicos hacen un gran equipo para que la empresa desarrolle sus negocios en la región en el marco de la ley”, afirma la Junta Directiva de Central Law.
“Las empresas pueden contar con abogados in-house que resuelven el día a día de las operaciones de la empresa, pero necesitan contratar un equipo legal externo especialista en el sector o rubro de la empresa”.
Junta Directiva Central Law
“Las principales preocupaciones de las empresas en la actualidad son el cumplimiento regulatorio (compliance) y el costo de los procesos legales en general”.
Octavio Martínez, Director académico en INCAE Business School
El rol del asesor externo debe ser brindar experticia. Mientras que “el asesor interno debe estar en la capacidad de resolver los temas de la empresa en su día a día sin entrar a temas de experticia. El asesor externo entra en juego cuando, por ejemplo, se va a hacer una adquisición y se requiere ya sea de mucho equipo, tiempo y experticia. Asimismo, es cuando se va a tomar una decisión tributaria, donde probablemente un tributarista que se dedica única y exclusivamente a eso está en la capacidad, dada su experiencia, de brindar una asesoría más certera”, expresa García Montenegro.
“En pocas palabras, pueden trabajar juntos, en la medida de que el abogado externo traiga experticia al abogado interno para dar una mejor asesoría a la administración de la empresa”.
RETOS Y APUESTAS EN EL RUBRO
Central Law es una firma full-service creada en 2003 y especializada en la región, que brinda asesoría legal integral a individuos y empresas en el desarrollo de sus negocios. Está conformada por un equipo de alrededor de 100 abogados especialistas en todas las áreas y sectores del derecho.
“Las empresas necesitan apoyarse en abogados especialistas que brinden servicios legales integrales de calidad internacional para asegurarse que los negocios que hacen en la región estén bien hechos y dentro de la normativa legal y regulatoria vigente. La firma ha logrado reconocimiento internacional y así nos distinguen los directorios internacionales”, expresan los directivos de la firma.
Los abogados de esta firma legal deben cumplir con un sistema estandarizado de métodos y procesos que ellos han creado. Además, el profesional se debe actualizar constantemente, complementando con estudios superiores a nivel nacional e internacional.
García & Bodán está conformada por alrededor de 100 personas, de las cuales 60 son abogados divididos en Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua. Esperan poder incursionar en el mercado de Costa Rica para finales de 2018.
“Nuestra firma ofrece todos los servicios legales. Nuestro valor agregado es nuestro interés de ponernos siempre en el zapato del cliente, no actuar simplemente como un asesor que de alguna manera se distancia de la realidad del cliente. En la medida que pienso como el cliente, comienzo a pensar diferente. Me preocupo por cada decisión y movida que realiza el cliente, porque no quiero que pierda, que arriesgue donde no debe. Quiero que tome las mayores ventajas que pueda. Poniéndonos en el lugar del cliente, creemos que podemos dar una mejor asesoría”, expresa García Montenegro.
Para el directivo su reto más grande, y en el que están trabajando fuertemente, es el de la tecnología. “Tenemos el gran reto de tecnificarnos más. Hoy por hoy tenemos diferentes sistemas para diferentes actividades de la firma. Lo que estamos buscando es un solo sistema que integre nuestras diferentes operaciones, desde el seguimiento a los casos y proyectos que llevamos hasta la contabilidad de la firma. Todo debe estar bajo un solo sistema tecnológico. Este es el principal reto donde esperamos enfocar la mayor cantidad de nuestras inversiones”.
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