Los niveles de morosidad se mantienen dentro de los estándares.
La industria de la región experimentó un incremento en los créditos colocados superior a la tasa de crecimiento de los activos contabilizados en los bancos. Un aumento de la cartera de crédito de un 11,4% que alcanza $160.749 millones. La mayoría está colocada en sectores económicos tradicionales concentrándose en consumo, comercio e hipotecario.
Guatemala presenta un crecimiento de créditos registrando $20.057,4 millones en el último año; es decir, 19,1% mayor a lo anotado en 2014. Le sigue Nicaragua, que aunque posee la cartera más reducida, sufrió una variación significativa de préstamos, alcanzando una tasa de 16,5%. En cambio, el crecimiento de economía nicaragüense fue de 4%.
República Dominicana con créditos superiores a $16.131,2 millones tuvo un aumento de colocaciones de 14,1%. Costa Rica con $26.264,2 millones incrementó su cartera en 11,2%. Honduras registra $10.049,6 millones, lo que significa una variación anual de 10,6%.
Panamá acumula la cartera de créditos más alta de la región al registrar $72,288.3 millones. Sin embargo, experimentó un alza de 9,8%. El Salvador obtuvo una de las menores tasas de crecimiento al alcanzar un 4,6%.
LA CALIDAD DE LA CARTERA
Al excluir el First International Bank, que está en proceso de liquidación voluntaria y presenta una mora de 142,24%, el nivel de morosidad más alto de la región fue el de Bandex al haber registrado 27%, una cifra considerada “temeraria” por el exvicepresidente ejecutivo de Banpaís, Lenin Palencia. “Hay algunas instituciones con indicadores de mora que requieren mucha atención debido a que muestran el deterioro de sus carteras. Hay que poner atención a sus temas de administración de riesgo crediticio”.
No obstante, Palencia considera que el promedio de mora de cartera crediticia del sistema bancario regional “se mantiene dentro de los estándares permisibles para los bancos centroamericanos”.
Las moras de carteras crediticias hasta de 3% son “excelentes”, lo que significa que son bancos “muy bien gestionados”. Si los niveles oscilan 3% y 5% amerita mucha atención a cómo se está gestionando el riesgo del crédito y si la cifra es mayor a 5% significa un deterioro importante que requiere atención enfocada a revisar el mercado objetivo. Además, hay que verificar la potencia en las gestiones de cobranza, explica el experto.
De las 191 instituciones bancarias, 152 de ellas reportan un indicador de morosidad menor al 3%, lo que revela el buen estado general del sistema bancario de la región.
LA SALIDA DE GRANDES BANCOS
Sobre las razones que tuvieron los grandes bancos como HSBC y Citibank para vender sus acciones y salir de la banca minorista de la región, el exvicepresidente ejecutivo de Banpaís atribuye la decisión a que “seguimos siendo un mercado pequeño y con problemas de capacidad de maniobra al haber problemas financieros”. En tanto que las instituciones locales conocen bien el mercado y están acostumbrados a ese tamaño. Complementa esta posición que los grandes bancos internacionales están sujetos a procesos de decisión y políticas corporativas que les dejan poco margen para adaptarse rápidamente a las necesidades de los clientes locales.
En cambio, Lenin Palencia sostiene que para los bancos multinacionales, Centroamérica aún no es totalmente atractiva. Señala que entre Honduras, Nicaragua, El Salvador, Costa Rica y Guatemala suman una población de alrededor de 37 millones de habitantes. La misma cantidad que los ciudadanos de Colombia. Cinco países, sistemas jurídicos y regulaciones y un tamaño potencia de clientes similar.
Además, “la región no resulta atractiva porque hay competencia local agresiva, pocos clientes grandes y un ingreso per cápita bajo, lo que hace una banca de personas con riesgos importantes, inseguridad jurídica y volatilidad política”.
Finalmente, el experto estima que el crecimiento de la banca se mantendrá y “tal vez se verá un poco de avance en préstamos para el sector construcción, ya sea puentes, carreteras y préstamos a constructoras”, así como la emisión de garantías bancarias.