El Instituto Nacional de Seguros (INS), de Costa Rica, es el más grande de la región. SISA ubica a El Salvador en el número dos de utilidades.
En su informe Perspectivas 2016: Seguros en Centroamérica y República Dominicana, la agencia calificadora Fitch Ratings proyecta que el sector asegurador mantendrá los niveles de desempeño, capitalización y liquidez en la mayoría de los países de la región.
“Hay una probabilidad limitada de realizar cambios entre los próximos 12 y 18 meses”, indica. No obstante, deja claro que puede haber modificaciones “significativas” en el perfil de riesgo de las compañías que conllevarán ajustes de calificación.
Con base en lo anterior, la perspectiva es estable y se fundamenta también en las tasas de crecimiento “buenas” de los mercados de seguro, lo que es congruente con los crecimientos estimados para los países centroamericanos. El perfil financiero es bueno porque “los mercados conservaron en conjunto un índice combinado relativamente bajo, que permaneció inferior a 100% (95,6%)”, establece el documento.
La agencia anticipa que las primas suscritas en Centroamérica y República Dominicana registrarían un crecimiento nominal en dólares de 4,8% en el cierre de 2015, lo que significa un avance más lento al considerar que en 2014 fue de 8,2%. El auguro obedece a un ajuste contable en las cifras financieras de Instituto Nacional de Seguros (INS), la aseguradora más grande en Costa Rica, que genera el 82% de las primas al interior y el 21% del total de primas en Centroamérica.
La calificadora de riesgo señala que la mejora en la aplicación de regulaciones, como lo requieren los estándares internacionales de solvencia, seguirá siendo un desafío este año.
Para 2016, el sector seguros puede crecer 3,5% a razón de “más competencia y devaluaciones de moneda en ciertos mercados”. Es decir, crecerá incluso a un ritmo más lento que el año pasado.
Eduardo Recinos, director sénior de seguros de Fitch para Latinoamérica, habla con AméricaEconomía Centroamérica – entre otros temas – sobre los efectos que tendrán algunas operaciones de venta y compra en el sector asegurador salvadoreño.
¿Se siguen manteniendo las proyecciones para el presente año?
Sí, se mantienen las proyecciones en la mayoría de países, excepto en El Salvador, donde estimamos que el mercado asegurador podrá no crecer o incluso registrar una contracción teniendo en cuenta el reacomodo que se registrará producto de la venta de la operación de Seguros e Inversiones y Filial, S.A. a Grupo Terra, con lo que se reducirá el volumen de negocios que recibe actualmente de compañías relacionadas en el exterior. Asimismo, el acuerdo de ASSA de adquirir el 100% de las operaciones de American International Group (AIG) conllevará la fusión de ambas compañías.
Adicionalmente, Fitch estima que la competencia agresiva de tarifas en El Salvador, que predomina en ramos como incendio y autos, de importante participación en la mayoría de compañías, junto con el ingreso de nuevos jugadores (Seguros Fedecrédito y Seguros Azul), podrá frenar el crecimiento del mercado, impactado en los últimos años por un crecimiento económico acotado.
En el mercado panameño pueden darse ciertos cambios ante la reciente aprobación de ley que regula el seguro obligatorio básico de accidente de tránsito, con cobertura de responsabilidad civil ante terceros en caso de accidentes. De aprobarse esta ley, las compañías aseguradoras serían las encargadas de proveer el servicio y verificar la cobertura para clientes existentes. La normativa implicaría un crecimiento relevante para esta línea de negocio, lo que se reflejaría sobre el sector en general, en términos de primas. No obstante, resultará importante una adecuada tarificación, considerando la frecuencia en siniestralidad para estos negocios.
¿Cómo se pueden enfrentar los desafíos catastróficos en Honduras, Nicaragua y El Salvador?
Se podrían fortalecer las exigencias regulatorias de esos países en cuanto a la constitución de reservas catastróficas por parte de las aseguradoras e incorporar en el cálculo de las mismas no solo el crecimiento en los cúmulos de retención, sino también el efecto de la inflación en el crecimiento de las sumas aseguradas que involucran riesgos catastróficos. También podría considerarse en el cálculo del margen de solvencia la ocurrencia de eventos catastróficos de la naturaleza, no únicamente terremoto.
¿Cómo ve la tendencia en el sector reasegurador de la región?
Las condiciones del mercado internacional del reaseguro se mantienen blandas, lo que se ha traducido en una mayor oferta del mismo en la región con condiciones favorables para las compañías cedentes y también para las reaseguradoras locales, quienes a su vez retroceden los riesgos en el mercado internacional.
En el corto plazo, aún se espera que las compañías aseguradoras y reaseguradoras locales se mantengan beneficiando de mejores condiciones en sus contratos de reaseguro y/o mejores precios en las tarifas ofrecidas.
¿Y en el caso de los corredores?
En la mayoría de los países de la región los corredores de seguros tienen mucho poder de negociación por las cuentas corporativas importantes que manejan. Por tanto, ejercen mucha presión comercial en cuanto a las tarifas de cuentas relevantes, principalmente en ramos de daños como gastos médicos, lo que también tiene su impacto en el resultado técnico de ciertas líneas de negocios.
Fitch no esperaría cambios en la injerencia que este canal comercial presenta para la mayoría de compañías aseguradoras. No obstante, muchas relacionadas a grupos financieros atenúan esta dependencia con su canal comercial bancario relacionado.
Otras buscan alianzas con canales comerciales alternos, lo que podría incrementar en el corto y mediano plazo.